Con fecha 5 de marzo de 2019 ha sido publicado en el BOE el Real Decreto-ley 7/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes en materia de vivienda y alquiler, que nuevamente  modifica (entre otras) la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de arrendamientos urbanos (LAU), fijando un nuevo marco normativo de aplicación a los contratos de arrendamiento celebrados a partir de su entrada en vigor, al día siguiente de su publicación.

Dicha nueva modificación sustancial sobre una materia de indudable incidencia práctica, económico y social, representa la tercera operada en los últimos dos meses y medio, lo que nos lleva a formular el análisis normativo que a continuación se expone, al objeto de tratar de mitigar los riesgos que la inseguridad jurídica, derivada de la inestabilidad legislativa, provoca.

Con carácter previo al análisis de los cambios normativos reseñados, conviene recordar que los contratos de arrendamiento de vivienda se rigen por la LAU (vigente a la fecha de la formalización del contrato), así como por la voluntad de las partes y el Código Civil supletoriamente. Habiendo sido múltiples los cambios operados en la LAU desde diciembre de 2018, al objeto de delimitar el marco normativo de aplicación a un concreto contrato de arrendamiento, habrá que estar a la fecha de su celebración:

Sentado el marco cronológico-normativo de aplicación cabe hacer un breve análisis de las principales modificaciones acometidas, lo que se lleva a efecto, en apretada síntesis, mediante el cuadro comparativo, que se adjunta, al objeto de facilitar su comprensión e incidencia práctica.